ARTICULO 30 AÑOS DE INTELIGENCIA ARTIFICIAL Y SEGUIMOS CONTANDO.

Por Rajat Taneja, presidente de tecnología de Visa

En un día cualquiera, Visa procesa cientos de millones de transacciones. Ya sea que estemos comprando un café o algo por Internet o pagando el metro, nuestro sistema procesa esa información de pago, la enruta entre las partes, autoriza las transacciones y gestiona el riesgo, todo en un abrir y cerrar de ojos.

Cada segundo, hasta 76,000 transacciones viajan por más de 200 países y territorios, en una plataforma construida sobre más de 300 millones de líneas de código personalizado y más de 24 millones de millas de ruta de red privada. En los últimos 12 meses, esa plataforma procesó US$14,5 billones de dólares en volumen total de pagos.

Una parte integral de esta operación, durante más de 30 años, ha sido la inteligencia artificial (IA).

Desde 1993 hasta ahora: IA para combatir el fraude y mejorar los pagos

En 1993, Visa se convirtió en la primera red en implementar tecnología basada en IA para la gestión de riesgos y control de fraude, siendo pionera en el uso de modelos de IA en pagos.

En los últimos 10 años, Visa ha invertido más de US$ 3 mil millones de dólares en IA e infraestructura de datos para habilitar un movimiento más seguro e inteligente de dinero e identificar y prevenir proactivamente el fraude. Y hoy, nuestra plataforma tecnológica está entre los ejemplos más poderosos de los beneficios tangibles de IA.

Con varios cientos de modelos de IA en producción, los cuales impulsan más de 100 productos, nuestras capacidades de IA y deep learning (aprendizaje profundo) ayudan a resolver desafíos y puntos débiles de larga data para compradores, vendedores e instituciones financieras.

Por ejemplo, productos como Cybersource Decision Manager de Visa, una herramienta de evaluación de riesgo y fraude, aplica el aprendizaje automático avanzado para evaluar datos históricos de transacciones y así detectar patrones. En nuestros Centros de Operaciones de Riesgo, la tecnología habilitada de IA y los expertos disponibles protegen el ecosistema de Visa, detectando y previniendo proactivamente miles de millones de dólares en intentos de fraude. Y el modelo de deep learning en tiempo real de Visa, Smarter Stand-In Processing (STIP), ayuda a mejorar las experiencias de pago durante las interrupciones de servicio al reflejar las aprobaciones de los emisores con una precisión de hasta el 95%. Y solo en 2022, la solución de Visa para el monitoreo de fraude en pagos en tiempo real, Visa Advanced Authorization (VAA), ayudó a prevenir fraudes por un valor estimado de US$ 27 mil millones de dólares.

Los datos, el poder computacional y los grandes modelos sofisticados de lenguaje (LLM) actuales nos colocan en la cúspide de una nueva era de IA. La IA generativa tiene el potencial de transformar cómo trabajamos, cómo desarrollamos y construimos nuevos productos y servicios, y cómo prestamos servicio a nuestros clientes. Personalmente creo que será una de las tecnologías más transformadoras de nuestro tiempo, y me entusiasma muchísimo lo que puede llegar a significar para los próximos 30 años en innovación en pagos.

Una nueva era: IA generativa para contenido, código y mejor servicio a los clientes

Desde el principio, hemos tenido equipos multidisciplinarios dedicados a analizar cómo implementar mejor la IA generativa para mejorar la eficiencia de la ingeniería, aumentar la productividad de los empleados, desarrollar nuevos productos y servicios y, lo que es más importante, prestar un mejor servicio a nuestros clientes. Mi objetivo es que el 100% de los empleados de Visa trabajen con IA generativa en alguna capacidad para fines de año.

Para mejorar la eficiencia de la ingeniería, estamos explorando y llevando a cabo pilotos a gran escala de capacidades de IA generativa para la codificación y pruebas diarias de nuestro software. Esto permitirá que nuestros desarrolladores se beneficien de técnicas sofisticadas de pair programming (programación en pareja) de IA a escala.

Para aumentar la productividad de los empleados, recientemente instalamos una instancia segura de GPT-4, sujeta a restricciones de uso responsable de IA. Entre muchos de sus beneficios, ChatGPT puede ayudar con el resumen, investigación y análisis de contenido, lo que nos permite a todos concentrar más de nuestro tiempo en actividades estratégicas de alto valor que impulsan el crecimiento de nuestro negocio y de nuestros clientes.

Para desarrollar nuevos productos y servicios, hemos duplicado nuestro uso de IA con varios miles de colegas que están trabajando en nuestras nuevas plataformas de datos e IA, ayudándonos a habilitar modelos aún más sofisticados en nuestras ofertas de productos.

Y quizás la aplicación más emocionante de la IA generativa girará en torno a la innovación para nuestros clientes y para el ecosistema de pagos en general. Ya estamos trabajando en múltiples frentes, colaborando para potenciar y mejorar el comercio con IA generativa en cada etapa del proceso de compra del consumidor.

La confianza sigue siendo fundamental

Todo este trabajo se sustenta en un compromiso con las más altas normas de gobernanza de datos y uso responsable de IA.

Es fundamental establecer la confianza de los consumidores en torno a la IA, la tecnología emergente y los datos. Durante tres décadas, Visa ha estado comprometida con la innovación sostenible mediante la creación de una estructura de gobernanza que prioriza la custodia responsable de datos: una base central para la IA responsable. En todas las áreas de innovación, Visa trabaja para garantizar que cualquier implementación o uso de datos se haga de forma responsable, segura, conforme y confiable – lo cual es parte de nuestra esencia como compañía y en lo que se basa nuestra reputación y marca de categoría mundial.

La confianza sigue siendo el núcleo de todo lo que hacemos, y mantener esa confianza es una responsabilidad que no nos tomamos a la ligera. Estamos emocionados con todo el trabajo que tenemos por delante y con el papel central que Visa y nuestros socios pueden desempeñar en la innovación del futuro del dinero.​

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