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Le exigieron un millón de dólares a cambio
de no revelar fotos íntimas. Dijo, además, que lo drogaban. El
cantante Alejandro Sanz, de 46 años, habló por primera vez sobre el
caso de chantaje que sufrió por parte de dos trabajadores de su casa en el año
2007.
El matrimonio lo amenazó con filtrar a los medios, su acuerdo de divorcio con Jaydy Michel y
algunas fotos íntimas si Sanz no accedía a pagarles medio millón
de dólares. El cantante se negó y recurrió entonces a la justicia. “Le
dije que ‘esta pelea la empiezas tú, pero la voy a ganar yo. Yo te voy a decir
cuando se va a acabar'”, recordó el artista.
El chantaje por parte de ellos fue algo que nunca
esperó venir: “En esa época yo estaba solo, estaba vulnerable y confiaba. Era
gente llevaba trabajando conmigo mucho tiempo y pensaba que eran parte de la
familia”. “La mujer me ponía pastillas para dormir en la comida. De película de
miedo”, reveló el intérprete de “Amiga mía”. De acuerdo a sus palabras, los
sujetos lo mantenían dormido la mayor parte del tiempo que él estaba en su
casa porque así podían aprovechar la propiedad sin problemas, igual como lo
hacían cuando estaba fuera.
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